Obra finalista de los Premios Guillermo de Baskerville 2017
Año: 2016
Editorial: Nevsky Prospects
Género: Relato
Coordinadora: Concepción Perea
Valoración: Recomendable
Soy una gran amante de las antologías. La unión de pequeñas ficciones, muestra de las narraciones de muchos autores, me encanta. A veces la cosa acaba bien, a veces no; en este caso, tenía muchas esperanzas puestas en el libro. El trabajo de la editorial me parece excelente y, además, en este caso había visto una serie de críticas que me llamaron mucho la atención.
Cuentos desde el otro lado es una fantástica recopilación de diecisiete relatos, una antología dirigida por Concepción Perea (La corte de los espejos) cuyo contenido se encuadraría dentro de la ficción weird. El rango genérico es amplio, hay terror (mi favorito), pero también fantasía y alguna cosa inclasificable pero que se disfruta también mucho. Es una gozada comprobar que la calidad de toda la antología es muy alta; todos los relatos tienen complejidad narrativa, imágenes muy buenas y cuentan historias bien cerradas y con un final lógico. También son interesantes los temas que se tratan: la pérdida, la muerte, el enfrentamiento a los miedos, la rivalidad magnificada, la soledad. Muy completo como conjunto.
Como os avanzaba, los relatos con un contenido que se decanta más por el terror han sido los que más me han gustado. En esa línea encontramos Antes que el cine (María Zaragoza), una excelente forma de abrir la antología que narra una historia sin que el tiempo del marco narrativo se mueva un ápice; el Manual para deshacerse de extrañas criaturas (David B. Gil), del que me quedo con el estilo de contar la historia, muy tierno, y con una trama digna de película noventera; La segunda muerte de padre (Cristina Jurado), con imágenes poderosísimas y un final sobrecogedor y desagradable; pero también la atmósfera opresiva y la sensación de lectura confusa que presenta Casandra 38 (Concepción Perea). Mención aparte para, por favor, La piñata (Jimena Sabadú), una obra magnífica, con un horror que se acrecienta a medida que pasa el tiempo y que parecería sacado de una película de Eli Roth si no fuera por el tono serio.
Por otro lado, tenemos también una serie de cuentos que se mueven más hacia lo fantástico ‘tranquilo’, e incluso algunos en los que la trama o la idea inicial es simplemente rara (de ahí lo de weird). Es en ese ámbito en el que se mueven con mayor o menor éxito el resto de relatos de la antología. De estos destaco especialmente El reparador de almas (Juan Cuadra), con una prosa muy bonita y una atmósfera densa, cargada de tristeza; y Ellos (Luis Manuel Ruíz), que parece haber salido directamente de un capítulo de Doctor Who pero, de nuevo, con un tono más elevado que la serie británica. También aparecen aquí Menos 1890 (Juan Ramón Biedma) y Ефремов-Стругацкий (Marc Pastor), los relatos más complejos, argumentalmente, de la antología. Ambos son lecturas muy interesantes que aportan una visión narrativa magistral y muy bien cerrada.
No quería comentar uno a uno todos los relatos (me parecen demasiados y demasiado cortos para ello), pero he querido mencionar aquí los que más disfruté durante la lectura, mis favoritos. Como os dije al principio, todos los cuentos me sorprendieron por sus buenas cualidades narrativas, pero me quedo con los ya mencionados por su inmenso interés. Del resto, mencionar como los que menos me gustaron El bazar de los deseos (Nerea Riesco) y El libro pequeñito (Sofía Rhei). Tuve el mismo problema con ambas: presentan tramas cuyas líneas argumentales ya conocía o me sonaban, pero sin aportar gran cosa narrativamente a la situación.
Pero pese a esto, creo que Cuentos desde el otro lado inclina de sobra la balanza hacia el lado positivo, además creando una visión general muy interesante de lo que son los temas, formas e intereses que se tocan en la actualidad en el fantástico español. Así, para aquellos que no acostumbren a leer género resulta una opción muy buena, y pienso que para los devoradores de toda obra de fantasía del mercado puede ser también una lectura interesante. Yo disfruté mucho de la lectura y no puedo menos que recomendárosla.