Carlos Almira Picazo: Relatos del Universo Lejano

Año: 2016
Editorial: El Transbordador
Género: Relato
Valoración: Está bien

No es Relatos del Universo Lejano un libro que entre demasiado por los ojos. Es llamativo, curioso, pero a mí no me cautivó. Sin embargo, debo decir que la lectura de los cuentos me sorprendió para bien. Estamos ante una serie de relatos sin hilo concreto ni temática común, al menos de forma aparente. Lo único que podría decirse que comparten es el mundo, que es algo metafórico, simbólico, inexistente en realidad.

Estos cuentos sitúan al lector en una suerte de mundo extraño, onírico, con unos seres confusos que a veces nos quieren resultar familiares. Así, por ejemplo, encontramos a Isaac Newton, capaz al fin de hablar de aquel incidente que cambió su vida, o a estudiantes investigando avances científicos raros; y sin embargo, pese a algunos ser personas reconocibles y otros no muy extraños en apariencia, tienen un toque de peculiaridad que los hace diferentes, que les da el tono onírico. Recuerda, en ocasiones, al tono de los relatos de Dunsany y Lovecraft que hablaban de ciudades enormes y luminosas y ensoñaciones profundas. Esta es la parte que me ha sorprendido muy gratamente, ya que es un tipo de narrativa que me encanta y no esperaba encontrar. Paso a hablar de forma algo más concreta de los cuentos que forman la obra.

En general, todos los relatos comienzan de una forma muy potente; pero solo son algunos los que continúan de esa forma hasta el final. Hablo de historias como “As”, capaz de mantener su impacto durante la breve lectura (pese a una última frase que, a mi modo de ver, sobra). Todas las que siguen esa línea de, llamémoslo así, investigación científica (como “El orden del mundo” o “En mi planetario”), han sido capaces también de mantener ese mismo énfasis; aunque es verdad que estos dos últimos pierden un tanto del interés por asemejarse bastante, en tono e idea, al primer relato. No sucede lo mismo en la historia más larga de la recopilación. Para mí, la más floja es “Los libros olvidados”: la que parecía la base más atractiva de todas se convierte en un monótono y confuso relato que no es capaz de aguantar todas las páginas que tiene. Me resulta una ejecución un tanto pobre, sobre todo viéndola en comparación con el resto de cuentos.

El homúnculo” es quizás de lo más curioso del libro y, aunque funciona un poco peor que los primero comentados, me resultó una lectura interesante. Es en este donde noté que tendría que haber repuntado un poco: digamos que se plantean una serie de temas que no se ven satisfechos. “Chatarra”, con un planteamiento que lo sitúa dentro de la ciencia ficción (a mí me recordó un poco a la película Serenity) y que quizás habría encajado mejor en una narración más larga, por una base que a mi gusto se queda ligeramente corta. “El regreso de Rotumb” es una divertidísima ¿reescritura, revisión? de la historia de Odiseo/Ulises de vuelta a Ítaca. Sí, este me ha encantado. Estoy más que dispuesta a este tipo de ideas, es curioso que aun a día de hoy pueda salir algo original, divertido de una historia más que vista, pero lo hace. En este caso se le da una maliciosa vuelta de tuerca al destino final del protagonista que no puedo menos que aplaudir. Por otro lado tenemos “El premio”, más sencillo, más esquemático, también con vuelta de tuerca final y un cierre muy apropiado para la recopilación por su tono nostálgico y, hasta cierto punto, algo más realista. Y por último (no en el libro, donde es el cuarto) tenemos “El incendio”. Es, desde luego, el relato que más confusa me dejó de toda la obra. Por supuesto, esa parece la intención, generar un desconcierto en el lector, cosa que consigue en tan solo dos párrafos. El incendio aparece como una deidad antigua que nadie se cuestiona, y casi parece que el relato va a ser una minucia más, pero qué equivocación: el final es sorprendente, y es el relato con mayor simbolismo.

En suma, Relatos del Universo Lejano me parece una buena compilación. Con sus más y sus menos, en general todos sus relatos se disfrutan bastante, con semejanzas a otras obras que me han resultado muy interesantes. Está bien, merece la pena si tienes la mente abierta al desconcierto y a la fantasía (si es que se puede incluir en este género). Como siempre, os invito a que no lo desechéis.