Vanesa Santiago: Memoria de Nosotros

por Javier Miró
Hace 5 años
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Año: 2019
Editorial: Impresiones privadas
Género: Novela corta (ciencia ficción)

Obra perteneciente a la sección oficial de los Premios Guillermo de Baskerville 2019

Lo que diga la mente colmena

Entramos en la recta final de esta primera fase de los Premios Guillermo de Baskerville 2019. A día de hoy podemos decir que tenemos las reglas, los jurados —menudos son, por cierto—, las categorías y casi todos los libros. Solo nos falta conocer cuáles serán los títulos afortunados que competirán por hacerse con los premios a los mejores libros independientes del año. Mientras tanto, hoy seguimos nuestra labor con Memoria de Nosotros, novela corta de Vanesa Santiago.

Atención, desconectado: al adentrarte en esta memoria, estarás entrando en el conjunto de Nosotros, algo hasta ahora solo posible a través de la conexión neuronal. Así es como somos Nosotros, un solo ser dividido en millones de cuerpos, y así formamos la sociedad más perfecta que jamás ha existido. Hasta los desconectados como tú saben que somos dignos de ser amados. Sabéis que somos dignos de ser temidos. Lo único que desconocemos es si esto lo sabe también Ryuta.

Es inevitable hablar de Memoria de Nosotros y acordarnos de UNO, de Nieves Delgado, flamante ganadora del Premio Guillermo de Baskerville de novela corta del año pasado. Ambas tratan el tema del transhumanismo con una perspectiva de mente compartida o mente colmena. La individualidad se diluye en una conciencia superior, un ente por encima de los miembros que la forman y todo por el bien de la raza humana. Hay diferencias entre ambas obras, por supuesto. UNO está más cerca de nuestro mundo, y se centra más en su inicio, las causas y las expectativas, mientras que Memoria de Nosotros transcurre en un futuro más alejado y difuso, y nos muestra su desarrollo y su posible final. Desde luego que el enfoque, el tono, e incluso la intención son distintas, pero resulta curiosa la posible continuidad entre una y otra obra. Tanto es así que casi podríamos definir a esta historia como la de UNO donde ha salido todo mal.

Por lo tanto, en esta novela corta nos encontramos con una visión negativa de esta tecnología que, no olvidemos, está diseñada para mejorar nuestras vidas. Sin embargo, no tenemos aquí un caso de tecnofobia, sino que la trama procura ahondar más en la situación y llegar a la roca madre de las implicaciones existenciales y filosóficas. Como toda buena obra de ciencia ficción que se precie, ni más ni menos. La crítica y las conclusiones quedan, al finalizar el texto, en manos del lector, lo que, oye, pues ni tan mal.

Memoria de nosotros. Lego. Libros Prohibidos La escritura es correcta. Vanesa Santiago tiene muy claro el tipo de novela que quiere escribir y no se entretiene con florituras. Desarrolla un lenguaje claro y que se lee sin dificultad. Personalmente, no he encontrado problema con esto, pero un poco sí con la estructura. Tiene un laaaaaaaaargo primer capítulo que, a mi entender, peca de demasiado explicativo. Luego lo soluciona centrándose en la acción y en los hechos que rodean a los protagonistas, pero nada más comenzar da un atracón de datos sobre el mundo y sobre lo que ha pasado que, francamente, podía haber solucionado de una forma más indirecta y elegante. Vamos, como de hecho hace después con el resto del libro.

Esto, afortunadamente, no es determinante ni empaña la historia que se cuenta en Memoria de Nosotros. El escenario que plantea Santiago es tan sobrecogedor como interesante. Ya no solo consigue hacerte reflexionar sobre una realidad que a lo mejor no tenemos tan lejana, sino que te mete el miedo en el cuerpo y te deja, como mínimo, mosqueado.

Una vez fui Nosotros, por eso los entiendo. Caminar con un chip sobre tu cerebro que abre tu mente al resto del mundo es como un murmullo rumoroso de un río. Cuando le prestas atención, oyes a los otros, sus pensamientos y sueños, sus habilidades y conocimientos, al lado de los tuyos; eres parte de Nosotros, un amputado Yo nadando en la conciencia colectiva. Si no le prestas atención al murmullo, ni siquiera lo oyes, pero en tu calma te alegra saber que está ahí igualmente, que estás unido al todo a través de la señal invisible que viaja de chip en chip hasta la estratosfera y vuelta.

La siempre necesaria vuelta de tuerca

No sé si he sido suficientemente claro a este respecto, pero, por si las moscas, y para que no me entendáis mal, tengo que recalcar que Memoria de Nosotros aporta cosas nuevas, tanto al género distópico como al debate transhumanista. No es una simple repetición de cosas ya vistas. De entre lo más destacado —sin caer en spoilers, claro— puedo comentar que entra con bastante acierto en asuntos que creo que están poco explorados, como son las sensaciones y experiencias compartidas. Y ahí caben la menstruación o la desconcertante pero apasionante fusión de los géneros.

Además, por si esta vuelta de tuerca no fuera suficiente, la última novela corta de la colección Sideralis aporta una nueva visión del Génesis, la creación y, por supuesto, las religiones. No se puede decir de Vanesa Santiago que no sepa aprovechar a fondo las oportunidades que brinda su propia historia.

Recordé las lecciones de mi infancia, donde a través de Nuestra memoria conocimos la esperanza humana en otra vida, esperanza que era cosa del pasado, pues la vida en Nosotros es eterna. Religión, lo llamaban; volver a unir. Unir de nuevo al ser humano con el infinito. El infinito es ahora la única religión, pues nos ha religado a todos en un gran y solitario Nosotros.

En resumen, Memoria de Nosotros, novela corta que se lee en tres suspiros, y que te gustará si eres del tipo transhumanista, futurista y cyberpunkero. Y, bueno, también si te gustó UNO pese a sus diferencias. Y todos sabemos que así fue.