Punto y seguido

Esta entrada es algo extraña. Distinta. Por lo pronto es mi primer texto en Libros Prohibidos. Apenas llegó y comenzó a cambiar cosas. Quizás, pero sólo algunas. Empezaría por presentarme, como manda la tradición, pero si no os importa lo dejaremos para el final. Hablemos de lo que me ha traído hasta aquí, este punto y seguido.

Javier abrió este sitio hace casi seis años. Ha trabajado en él más de lo que nadie tenemos derecho a pedirle. A día de hoy, no entiendo cómo ha logrado llevarlo todo tan bien. El ritmo de publicación de Libros Prohibidos es alto y constante. Y sí, tiene ayuda, unos colaboradores maravillosos que están al pie del cañón no sólo reseñando, sino también escribiendo artículos. Pero soporta un gran peso. Llevar una web como esta es de esas cosas que son aparentemente sencillas. Total, solo es decir cuatro cosas sobre lo que has leído. Lo cierto es que no es así. A la faena de leer y reseñar -que ya de entrada es más lento de lo que se podría pensar- hay que sumar un gritón de labores diarias. Desde contactar con las editoriales, cuadrar cuentas, conseguir recursos y ejemplares, hasta preparar los premios literarios que se celebran anualmente. Y tras tanto tiempo Javier ha querido dar un paso a un lado.

No se marcha, se quedará aquí como colaborador. Lleva ayudándonos algo más de dos meses a entender el lugar, a llevar las redes, a ir cogiendo el punto a un trabajo faraónico que de veras no sabemos cómo ha conseguido mantener solo a este nivel. Se toma tiempo para él, para volver a leer con calma, para trabajar y para escribir. Porque él además escribe y eso reclama su parcela; en la agenda y en la cabeza. Seguirá con mil proyectos, con ese canal de Youtube con el que está sacando contenido la mar de interesante y con su vida.

Pero esto no cierra, ni mucho menos. De hecho estamos más vivas que nunca.

Buena parte del tiempo hablo de nosotras, pero entonces, ¿quiénes somos las nuevas cabezas visibles de Libros Prohibidos? De entrada quiero insistir en la falta de pánico. Los colaboradores seguirán siendo los de hasta ahora. Continuaremos teniendo relatos, reseñas y temas. Esperamos que ahora simplemente, al haber más manos, podamos llegar a más cosas, aunque no creo que mejor. Eso sí, ganas no nos faltan.

Ana Casanova (en la foto) es novelista y ensayista. Se licenció en Filosofía, después viró hacia la crítica literaria y la narratología y estudió Escritura Creativa. Se lanzó a escribir en serio con un blog de reseñas de literatura, cine y videojuegos que después dejó para ponerse a trabajar en su primera novela (aún no ha muerto en el intento; cuando no sabe cómo seguir, se pregunta qué haría William Gibson). Lee ciencia ficción, en especial cyberpunk y space opera, pero también narrativa literaria y ensayo de humanidades. El cine es su segunda casa y en su tiempo libre se dedica a la enseñaza. Tiene una cuenta de Instagram en la que pone fotogramas de películas que le han gustado.

Mariela González es periodista y escritora. Lleva participando como redactora en webs de todo tipo desde hace más de diez años, aunque actualmente podéis encontrarla por Fantífica, cuando el malvado mundo de la comunicación corporativa y el marketing le deja tiempo para escribir de lo que realmente le gusta, las Cosas Importantes™. No le hace ascos a ningún género literario, pero desde que se subió a lomos de Fújur, con ocho tiernos añitos, decidió que pasaría todo el tiempo posible explorando Fantasía. También alimenta su pila de lectura con cómics, y podéis leerla en conversaciones videojueguiles en Twitter (y en los ensayos sobre el mundillo que ha publicado con Héroes de Papel).

 

A Sara Terrero ya la conocéis. Lleva en Libros Prohibidos unos cinco años, tras participar como jurado en los premios Guillermo de Baskerville. Desde entonces se dedica a hablar de libros en Internet y la literatura se convirtió en su sueño/carrera profesional. Estudió Teoría de la Literatura y después Edición. Le gusta la literatura de terror, los libros escritos por mujeres y los ensayos sobre género (de uno y otro tipo), aunque fuera del espectro de Libros Prohibidos lee de todo, sobre todo narrativa en la que no pasa nada. Podéis encontrarla en su instagram literario El papel amarillo, donde se pone muy entusiasta con todo lo que le gusta, o en su Twitter.

Y por último yo. Me llamo Maritxu Olazabal (ahí tenéis una foto mía), algunos me conoceréis por Origen Cuántico. Eso es cierto y no va a cambiar en un futuro cercano. Estudié arquitectura, aunque muy pocas veces he trabajado en un estudio al uso. También estoy en Fuera de Series, una web en la que analizamos el panorama de las series tanto españolas como extranjeras. No sé muy bien cómo acabé haciendo este tipo de cosas, pero me gusta mucho. Leo, bastante y variado, siempre lo hice. De pequeña mi padre me llevaba de excursión por las librerías de Barcelona. De entonces guardamos gustos de lectura comunes, aunque no todos. A mí, además de la literatura negra, la política o la gastronómica, me gusta el género y la literatura juvenil. No entiendo a esa gente que trata los libros de chavales como lecturas de segunda. Y no me fío demasiado de la versión que dé esa gente de lo que es la infancia y la adolescencia.

A partir de ahora me podréis encontrar aquí reseñando, y en las redes de Libros Prohibidos. La voz que ha escrito allí estas últimas semanas es la mía. Esperamos que os esté gustando, tiene algo más de pelo en la cabeza, y menos conocimiento del género. Pero le pone muy buena voluntad y entonación.

Dadnos un poco de cancha a las nuevas y un buen achuchón a Javier en este punto y seguido. Que como hemos dicho no nos deja, pero el pasito a un lado ha tenido que ser de los más difíciles de dar. Esto es su niño, y nunca es fácil dejarlo con las canguros. Por encantadoras que nos digan nuestras madres que parecemos.